Eloy Molina deja la presidencia de FECAM

Tras luchar por la integración de las personas con discapacidad intelectual en el deporte durante algo más de 20 años, da paso a Jesús Ruiz como nuevo presidente

En el año 2000, Eloy Molina fue elegido presidente de la Federación de Deportes para Personas con Discapacidad Intelectual de Castilla La Mancha (FECAM). Licenciado en Filosofía y Letras por la Universidad de Navarra, ha peleado desde entonces para que estas personas pudieran hacer deporte federado como cualquier otra. Tras algo más de 20 años ocupando el cargo, ha dejado su puesto y se ha despedido de «La gran familia de FECAM», como él mismo dice, a través de una emotiva carta:

«Ayer fue un día agridulce para mí porque era mi último día como presidente de FECAM. Lo dejo voluntariamente y de forma meditada porque creo que lo mejor para Fecam es que otras personas con nuevas ideas e ilusiones continúen la labor iniciada y que lo hagan sobre la base actual. No ha sido una decisión fácil de tomar; pero no es bueno que los mandatos se alarguen tantos años.

Durante más de veinte años he dedicado intensamente mi vida para conseguir que las personas con discapacidad intelectual puedan practicar deporte federado como cualquier otra persona que así lo desea en la sociedad. Para ello había que crear una Federación deportiva como cualquier otra, con sus Clubes, sus deportistas, sus técnicos, sus entrenamientos y para que pudieran participar en competiciones regionales, nacionales e internacionales.

Los inicios fueron difíciles porque todo era muy diferente; no se tenía muy claro que esto pudiera ser así, ni las personas que estaban en ello pensaban que este fuera el camino idóneo (de hecho sigue habiendo gente con otras ideas), ni las propias familias creían en las capacidades de sus hijos para alcanzar este tipo de metas deportivas. Sin embargo el reto era apasionante y nuestros deportistas merecían más que nadie que se luchara por ellos. Muchas personas empezaron a creer y comenzamos una apasionante y larga andadura hasta llegar a hoy.

En el camino siempre me han acompañado grandes y buenas personas en todos los ámbitos que, como es lógico, sin su colaboración y ayuda nada de esto habría sido posible.

Si algo hemos tenido claro en FECAM desde el principio es que lo más importante son nuestros deportistas, ellos son los que con su esfuerzo, trabajo constante, ilusión y deportividad nos han dado fuerzas para seguir en el empeño; cada día, en cada entrenamiento, en cada campeonato, han sido y son un ejemplo para todos y nos han demostrado que nuestro trabajo ha merecido la pena y que todos se han ganado con creces el que sean considerados ya como unos deportistas más, sin tener que añadir ningún calificativo que no sea el de GRANDES.

Las familias se fueron involucrando más y más y de una apatía inicial pasaron a ser los mayores forofos de sus hijos y los mejores defensores de sus derechos deportivos. Quiero hacer, de forma pública en esta ocasión, una especial mención a mi mujer; sin cuya ayuda y comprensión hacia mis muchas horas y días de ausencia, me habría sido imposible hacerlo. Gracias de nuevo Inés.

Técnicos que trabajaron con ilusión desde el principio, que se formaron cada vez más para adaptar las formas de entrenar a nuestros deportistas y que lo hacen con auténtica pasión y convencimiento. Asociaciones que fueron confiando en Fecam y dándose cuenta de la importancia del deporte para conseguir unos beneficios que van mucho más allá del ejercicio físico. Autoestima, aprendizaje de normas sociales, compañerismo, socialización, visibilidad…. en definitiva normalización social a través del deporte.

Directivos de Clubes y de la Federación que han dedicado muchas horas para avanzar y consolidar los programas que fuimos sacando poco a poco. Un magnífico equipo de trabajadores que fue creciendo hasta llegar a los cuatro que tiene Fecam en la actualidad y que viven su trabajo con pasión.

Un Voluntariado deportivo que es modelo para otras federaciones; así como un Equipo de Organización formado por unas maravillosas personas que desde hace ya muchos años y de forma altruista colaboran para que nuestros Campeonatos hayan alcanzado un altísimo nivel de calidad; personas a quienes FECAM les debe una enorme gratitud.

Por tanto, si algo puedo decir de estos años al frente de la Federación es que me han acompañado personas buenas a las que desde esta carta quiero dar las gracias y con las que en muchos casos he trabado una gran amistad.

Gracias también a todas las instituciones públicas, especialmente a nuestro Gobierno Regional, que siempre ha estado con FECAM para colaborar en cada uno de nuestros programas y que siempre ha entendido nuestros planteamientos. Y gracias también a las Entidades locales y provinciales; especialmente al Ayuntamiento y la Diputación de Albacete.

Un auténtico privilegio también que empresas privadas se hayan animado a patrocinarnos y que continúen haciéndolo en este tiempo de crisis: ASISA, CEREALES CANDELO, FUNDACIÓN IBERDROLA, CARREFOUR, HOTEL BEATRIZ ALBACETE, FUNDACIÓN SOLIDARIDAD, ALBALUZ…

Me duele acabar mi mandato en medio de esta maldita pandemia, porque tenía previsto despedirme personalmente de nuestros deportistas, mis grandes ídolos y amigos, durante los campeonatos de este año que, finalmente, tuvimos que suspender. En cualquier caso los seguiré viendo y disfrutando de su compañía porque esto no es una despedida sino un hasta siempre.

Me voy con la satisfacción del deber cumplido, con la conciencia tranquila y como siempre a disposición de FECAM y de Jesús Ruiz, su nuevo presidente, para todo aquello que me requieran.

Todas y cada una de las personas mencionadas han hecho que, a lo largo de estos años, hayamos formado una gran familia de la que me siento muy orgulloso de formar parte:
La gran familia de FECAM.

Para todas ellas un fuerte abrazo y HASTA SIEMPRE».

Foto de portada: FECAM