XXII y XXIII rutas senderistas de la Diputación Provincial de Albacete, en Chinchilla de Montearagón y El Bonillo

Este fin de semana han tenido lugar otras dos pruebas
de la XII Edición de las Rutas de Senderismo 2025, que organiza la Diputación
Provincial de Albacete. El sábado, en Chinchilla de Montearagón, en la comarca Monte
Ibérico-Corredor de Almansa, y el domingo en El Bonillo, en la Sierra de Alcaraz y
Campo de Montiel.

Así, el sábado, los senderistas visitaron Chinchilla de Montearagón, para recorrer la
ruta denominada “El Faro de la Mancha”, con una dificultad técnica media, un
recorrido circular de 14 kilómetros de distancia, cinco horas de duración y con salida a
las 9:00 de la mañana desde la Plaza de Santo Domingo del municipio.
En la plaza de Santo Domingo, desde donde comenzarían, les recibiría Francisco
Morote, alcalde del municipio, quien les daría la bienvenida. Tras la foto de familia,
sobre las nueve, de una mañana soleada, arrancaron la marcha para adentrarse por
una de las puertas que da acceso a la “Sierra Procomunal de Albacete y Chinchilla”.
Giraron a la derecha, hacia el poniente por una senda que les llevaría a la cara más
occidental del Cerro de San Cristóbal, con unas fantásticas vistas, ya que es un punto
muy cercano a Chinchilla de Montearagón. Continuarían dirección este, por senda, en
dirección al “Pozo del Petróleo”. Un lugar donde una empresa petrolera realizó una
prospección, en la zona y dejando alguna construcción y un pozo tapado donde se hizo
la exploración.

Continuarían por esta senda, rodeados de pinos con fantásticas vistas, primero llano y
luego bajarían la ladera hasta llegar a la antigua “granja de las perdices del ICONA”,
avanzando pegados a la valla, para coger una pista y llegar al área recreativa de “las
barbacoas”. Aquí les esperaba un contundente almuerzo, junto a un bonito obsequio
para los participantes, por cortesía del Ayuntamiento de Chinchilla y el Consorcio
Sierra Procomunal.

Seguirían un tramo por la pista, para luego coger una senda a la izquierda, hasta llegar
a un lo alto de un collado, que bajarían. Entre gran cantidad de espartos en flor,
llagarían, tras un ascenso, al Bosque de las Palabras, lugar donde hay postes de
madera con banderas de frases escritas, que está inspirado en la tradición tibetana de
colgar mensajes positivos para que el viento difunda sus buenas vibraciones. Muy
cerca se sitúa el Mirador de la Sala, con maravillosas vistas y un lugar donde se
contempla a la gente que vuela en parapente, ya que hay una pista para este fin.
Continuarían por la Rambla del Agua que les salía pagada al camino, y que les
conduciría hasta el “Refugio de la Casa del Agua”, una casa-refugio de piedra en lo alto
de una loma.

Tras refrescarse un poco, en un día de calor, continuaron. Bajaron primero hacia un
cauce seco, antes de afrontar la pronunciada cuesta hacia el “Corral de la Matuja”.
Cogerían aquí una senda, entre pinos, hasta unos balcones naturales, que fueron
formados por la fractura que produjo la orogenia Alpina y que elevó el fondo marinodel “golfo de Albacete”. Mirador natural con unas espectaculares panorámicas de “Los
Llanos de Albacete”.
Un poco más adelante pudieron contemplar las fantásticas vistas del “Cerro de San
Blas”, sobre el que está construida la Chinchilla medieval, con el imponente castillo
presidiendo en todo lo alto.

Llegarían al “Portichuelo”, cogerían una senda a la izquierda, para pasar por encima del
“Paraje de San Miguel” hasta llegar a “los escalones”. Pasarían por un cuco antes de
llegar a la “Era del Ataúd”, donde se ha instalado una zona de calistenia para el uso y
disfrute de los visitantes de la zona. Ya sólo les restaba coger otra senda y adentrase
en el “Barrio del Cerro” para volver al punto de salida.
El domingo, otros cincuenta participantes distintos visitarían El Bonillo, para recorrer la
prueba denominaba “Ruta del sabinar por los Blancos y el Infierno”, con una dificultad
técnica baja, un recorrido circular de unos 12 kilómetros de distancia y unas cuatro
horas de duración.

Tomarían un café en la plaza del pueblo, para luego coger de nuevo el autobús que les
llevaría hasta Carretera AB-607, entre El Bonillo y Ossa de Montiel, km. 14, junto al
cortijo Los Blancos, donde comenzaría la ruta a pie. Sobre las nueve de otra mañana
soleada, y desde el cortijo de Los Blancos, se dispondrían a recorrer una fantástica ruta
por un espacio que no en todos sitios se encuentra, un sabinar.

El sabinar es probablemente el hábitat más singular de los que existen en la comarca
natural del Campo de Montiel.  Desde el comienzo van rodeados de sabinas de distinto
porte y altura, los primeros kilómetros por zonas con distintas densidades de arbolado,
y algún campo de cereal. Luego se adentrarían en un bosque con únicamente estos
árboles y gran diversidad de plantas aromáticas. Pasarían por un lugar interesante, un
aljibe que recogía al agua de las ramblas y que todavía mantiene su estructura, aunque
ya no se utiliza desde hace años, en su época era utilizado para dar de beber al
ganado.
Y poco más adelante se entrarían en un tramo con mucho encanto, muy bonito, el
“Vallejo de los Calabazones”, que llega al final al punto más bajo de la ruta, en el río
Alarconcillo, lugar que aprovecharon para tomar una rica empanada, cortesía del
Ayuntamiento de El Bonillo.

Tras salir del vallejo, comenzarían a subir por terrenos del cortijo de El Infierno. Se
llega a un cortijo situado en un alto desde donde se pueden ver al norte las curvas y
riscos formados por el río Alarconcillo a lo largo de miles de años.
Ya de regreso, pasarían por algún campo de cultivo junto al sabinar para llegar
finalmente, de nuevo al cortijo de Los Blancos, donde comenzaron.
Una vez en el núcleo urbano, harían una visita histórico artística por el Casco Antiguo,
Iglesia, Museos (Museo Parroquial, con el cuadro de El Greco, y Museo Renacentista
de Juan de Borgoña), la Plaza Mayor, La Picota y Molino.

Y para rematar, tras la comida, dieron una clase de iniciación al deporte del golf, en el
Campo “La Lagunilla”, así como una visita en buggy al campo.
Otras dos fantásticas rutas, con el campo en todo su esplendor y con una agradable
temperatura para el senderismo, que disfrutaron los cien participantes de esta
actividad, gracias a la iniciativa de la Diputación Provincial de Albacete.
PRÓXIMA SALIDA YESTE
La próxima cita será el domingo 1 de junio, en Yeste, con la prueba denominada
“Cañón del rio Tus”. Una ruta circular, de 10 kilómetros de distancia, de una dificultad
media-alta, con una duración aproximada de cuatro horas. La salida será a las nueve y
cuarenta y cinco de la mañana desde Balneario de Tus, en Yeste.